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Donar órganos en vida a desconocidos será legal

La medida está pendiente de un protocolo que impida hacerlo por dinero

VANESSA PI

Cualquier persona que desee donar un riñón a un desconocido podrá hacerlo. La Organización Nacional de Trasplantes (ONT), dependiente del Ministerio de Sanidad, ultima los detalles para regular este tipo de donaciones, inéditas hasta ahora en España. Así lo expresó ayer el coordinador de la ONT, Rafael Matesanz, en la celebración del Día Mundial del Riñón.

El donante altruista, a quien la ONT ha bautizado como 'buen samaritano' en alusión al personaje de la Biblia no es habitual, pero 'siempre ha existido', explicó Matesanz a Público. Se trata de personas que han acudido a centros de salud y hospitales a ofrecer uno de sus riñones sin pedir nada a cambio. 'Cada año, dos o tres personas llaman por teléfono ofreciéndose', calcula Lluís Guirado, nefrólogo de la Unidad de Trasplante Renal de la Fundació Puigvert de Barcelona.

La normativa impedirá que donante y receptor lleguen a conocerse

Aunque la ley no lo prohíbe, estos ofrecimientos se habían rechazado hasta ahora, porque 'la donación en vivo no se ha desarrollado mucho en España', y también por temor a que el donante no tuviera 'el equilibrio psíquico adecuado' o 'buscara el negocio', justificó Matesanz. La legislación española persigue el tráfico de órganos. El riñón es el miembro que permite un trasplante más seguro, tanto para donante como para receptor.

La ONT se replanteó su postura hace unas semanas, cuando la coordinadora de trasplantes andaluza le informó de que un hombre se había dirigido a ellos ofreciendo uno de sus riñones. Él es el único candidato con opciones para convertirse en el primer donante altruista de España.

La ONT le está realizando diversas pruebas para comprobar que su estado de salud es óptimo y 'descartar que tiene desequilibrio psíquico y cualquier tipo de interés monetario', explicó Matesanz. Además, ahora debe definirse un sistema para que el donante y el receptor nunca lleguen a conocerse. Un comité de expertos de la ONT ultima un protocolo para determinar este proceso. 'Seguramente se hará como con el trasplante cruzado, que también preserva el anonimato', señala la doctora María Valentín, miembro de este grupo, en el que hay expertos de varias disciplinas, incluido un especialista en bioética y un juez.

El trasplante de riñón es el que mejor se ajusta por ser el más seguro

Para hacer un trasplante cruzado que consiste en el cruce de dos parejas de donante y receptor incompatibles entre sí los donantes tienen que firmar una declaración ante un juez del Registro Civil. En el escrito sostienen que están convencidos de ello y que no buscan obtener nada a cambio.

La doctora Valentín también afirma que el anonimato se asegura porque se sustituye la identidad de las personas 'por códigos, de forma similar a la protección de testigos, para evitar una posible coacción futura'.

Hasta el momento, el trasplante cruzado era la fórmula más innovadora de donación en vida. Desde que se permitió esta práctica, sólo se ha hecho un cruce con dos parejas. Otras 27 están apuntadas al programa, a la espera de que también se añada alguna pareja incompatible entre sí, pero con posibilidad de realizar un trasplante con alguno de los inscritos.

La ONT confía en que la figura del buen samaritano sea clave para realizar más trasplantes cruzados. 'En Estados Unidos [donde se permiten las donaciones altruistas], cruzan cinco o seis parejas utilizando a este tipo de donantes como comodín', relata Matesanz. El doctor Guirado, defensor confeso de las donaciones altruistas, está convencido de que 'ayudarán mucho a realizar las combinaciones'.

La Ley de Trasplantes, de 1978, no exige que haya parentesco entre el donante vivo y el receptor, pero, dada la alegalidad hasta el momento de la donación altruista, lo más común es que las donaciones se produzcan entre parejas y hermanos. Sólo un 2% se da entre amigos muy íntimos.

Incluso en estos casos, se debe seguir un protocolo para descartar cualquier tipo de coacción o interés económico subyacente. 'La legislación española es bastante restrictiva: exige al donante, al receptor y al médico ir ante el juez', recuerda Matesanz.

Aunque España es el líder mundial en número de donantes, la inmensa mayoría de los órganos trasplantados proceden de personas fallecidas. La ONT ha detectado que este modelo es decadente, ya que ha aumentado la edad de estos donantes por el descenso de la mortalidad en las carre-teras. Por ello, pretende potenciar ahora el trasplante entre vivos. En EEUU hace años que hay donantes altruistas, y Gran Bretaña realiza estos trasplantes desde 2007.

'Hoy, la donación de vivo es mucho menos arriesgada que hace 20 años', reivindica Matesanz. El doctor Guirado recalca que la mortalidad se da en uno de cada 3.500 donantes, y que 'en España no ha falle-cido ninguno', por lo que el 'peligro es muy pequeño'. Además, el donante, al quedarse con un solo riñón, se somete a más controles médicos que un ciudadano normal.

Pese a todo, sólo un 10% de los trasplantes renales se realizan con un órgano de una persona viva. Aunque la cifra va en aumento: un decenio atrás, este tipo de donaciones sólo representaba el 1%. El año pasado se produjeron 2.328 trasplantes renales, 1.099 de hígado, 274 de corazón, 219 de pulmón, 97 de páncreas y 11 de intestino.

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