Mariano Rajoy ha prometido, en su discurso de investidura, reformas para acabar con el fracaso escolar, hacer las universidades más competitivas y fomentar un 'espíritu emprendedor' en el alumnado (lee el discurso íntegro en PDF). Los detalles acerca de cómo piensa alcanzar estos objetivos, en cambio, no han sido desvelados.

El futuro jefe del Ejecutivo ha repetido hoy lo que ya adelantó el Partido Popular en su programa electoral: un bachillerato de tres años, la promoción del bilingüismo español-inglés y el favorecimiento de la 'opción trilingüe' en las escuelas de las comunidades con una lengua cooficial.

Rajoy ha vuelto a prometer que mejorará la educación obligatoria y gratuita hasta los 16 años y ha asegurado que buscará 'el más amplio consenso' para abordar los cambios. Además, garantizará 'unas enseñanzas comunes en todo el territorio nacional'.

A falta de detalles, el líder conservador ha apelado a los valores. El esfuerzo, el gusto por aprender, el espíritu emprendedor, la exigencia y la responsabilidad personales son los pilares en los que Rajoy asegura que basará el fin de la 'inaceptable' tasa de abandono escolar.

En cuanto a la educación superior, Rajoy ha afirmado que desarrollará una política ambiciosa de competitividad, que exige 'una reforma de las universidades y una apuesta por la innovación, la excelencia y la internacionalización'.

El PP garantiza unas 'enseñanzas comunes en todo el territorio nacional'

También ha propuesto un nuevo sistema nacional de acceso a la función docente para atraer a los mejores profesionales, primando el mérito y la capacidad, reconocer su autoridad e incentivar su labor.

Rajoy ha anunciado la puesta en marcha de una mesa de Diálogo Social que incorporará incentivos para la inserción laboral de los jóvenes y una reforma de la formación profesional, con nuevas formulas que fomenten el empleo.