Es evidente y nadie lo niega ya a estas alturas: la relación entre Izquierda Unida e Iniciativa per Catalunya Verds no pasa por su mejor momento. Pero llueve sobre mojado: se ha ido enrareciendo esta legislatura y ahora se recrudece por la cercanía del 20-N y de la fecha tope para comunicar a la Junta Electoral la formación de coaliciones, el 7 de octubre. Ayer lunes, el rompecabezas se completó con un elemento más: la firma en Barcelona del acuerdo de asociación entre ICV y Equo [descargar aquí].

Como avanzó en su edición de ayer Público, el protocolo, de tres folios, ratifica que ambas fuerzas se consideran formaciones “hermanas” que se reconocen como un “referente común” dentro del “espacio político de la izquierda verde y de la ecología política” y que representan en España al Partido Verde Europeo (PVE).

El punto 5 de los 14 que comprende el acuerdo evidencia la distancia con IU: “Ambas organizaciones coordinarán y consensuarán sus estrategias electorales, la oferta electoral común, sus alianzas políticas y sociales y sus estrategias parlamentarias. Sin menoscabo de las políticas de alianzas que se puedan establecer, Equo e ICV acudirán conjuntamente a las elecciones europeas. Los/las eurodiputados/as elegidos de ambas formaciones serán miembros del Grupo Verde Europeo y del Partido Verde Europeo”.

Además, Equo podrá formar parte de los 'órganos de dirección' de ICV, y al revés. Una relación orgánica que no existe entre la federación de Cayo Lara y los ecosocialistas catalanes. Otros aspectos recogidos en el texto es que las juventudes de las dos fuerzas coordinarán su acción, y también lo harán las respectivas fundaciones. Un órgano colegiado gestionará asimismo el protocolo, lo desarrollará y dirimirá eventuales controversias. 

Herrera no excluye alianzas con IU, y le tiende la mano para formar grupo

Joan Herrera y Juan López de Uralde presentaron en rueda de prensa en Barcelona el protocolo. Y en ella el secretario general de ICV no escondió su voluntad de formar grupo con Equo en el Congreso tras el 20-N, informa Efe. Aunque lo óptimo sería aglutinar a sus diputados, los de Compromís –socio de Uralde en Valencia– y a IU. Y si Lara necesitara del apoyo de los ecosocialistas para constituir grupo, lo tendría, afirmó. 'Somos compatibles'. Herrera también aseguró que el compromiso de acudir a las europeas con Equo “no presupone nada” ni excluye alianzas con IU. Uralde repitió que su proyecto es “diferente” al de Lara y que el acuerdo con ICV normaliza la relación de dos fuerzas “que se entienden”.

El pacto con Equo se rubricó con el melón de la negociación de IU e ICV aún abierto. En el equipo del coordinador federal restaban trascendencia a la firma. “No debemos entrar. Lo respetamos y no lo interpretamos como un pacto con Uralde. Estaba previsto”, señalaban, dejando caer, no obstante, la crítica al “mal estilo” de los ecosocialistas. Igual “respeto” mostró Esquerra Unida i Alternativa (EUiA), marca catalana de IU. “Un protocolo similar tenemos nosotros con IU y con el Partido de la Izquierda Europea”, alegaba a este diario su coordinador, Jordi Miralles.

Los intereses de las partes son contrapuestos. Lara pretende una coalición en todo el Estado con ICV. EUiA también quiere que los votos de la alianza computen para IU el 20-N y ambiciona el número dos de las cuatro candidaturas catalanas, como premio a haber cedido a los de Herrera el senador autonómico en 2010. Ambas demandas las dejó por escrito en una resolución aprobada hace una semana por su máximo órgano de dirección, el Consell Nacional.

“Lo que no necesitamos son ni amenazas ni órdagos”, se quejaba a este periódico Jordi Guillot, vicepresidente de ICV. “Pedimos serenidad, templanza y sentido de responsabilidad”. El dirigente refrendó la posición conocida de su partido: sí a la firma de una coalición formal con EUiA sólo en Catalunya y no a la cesión del número dos “porque las circunstancias no han cambiado desde las generales de 2008”. A IU le ofrecen un “acuerdo electoral”, una garantía sobre el papel (pero no ante la Junta Electoral) de que le ayudarán a formar grupo parlamentario en el Congreso. Guillot insistió, como horas antes había hecho Herrera, en que EUiA “no puede imponer” la alianza con IU, como ellos tampoco habían obligado al pacto con Equo. 'Esa es nuestra cesión: comprometernos a no ir junto a Juantxo el 20-N'.

Lara confía en que cuaje el pacto, porque 'lo contrario sería malo para IU, EUiA e ICV'

En rueda de prensa ayer en Madrid, Lara confió en cerrar un acuerdo, porque “lo contrario sería malo para IU, para EUiA y para ICV”. Miralles incidió en que “es momento de unidad y de suma”, y que el pacto con Herrera “es necesario sí o sí”. Otros dirigentes de EUiA avisaron de que, si fracasa el diálogo, concurrirán sin ICV en Catalunya: “Si no bajan un peldaño, habrá ruptura. Nos han colocado entre la espada y la pared”. La dirección federal de IU apoyaba ayer esta decisión: “Si no hay acuerdo, claro que EUiA se presentará por separado, sin género de dudas, porque EUiA firmará la coalición con IU”. Miralles no contemplaba esa opción.

“Es inimaginable ese escenario. Sería injustificable que, ahora que los ciudadanos piden unidad, hubiera ruptura porque se pida el número dos”, aducía Guillot.

IU espera que esta semana ICV “clarifique” las cosas. Ramón Luque, coordinador de campaña, invocó el compromiso de la federación de “salvar obstáculos” porque “el país reclama grandes acuerdos de la izquierda”. Unos y otros urgen a la unidad. Pero, por ahora, no hay reuniones fijadas en la agenda para allanar el camino.

Juantxo López de Uralde tiene desde ayer número dos: Inés Sabanés. El líder de Equo quería hacer tándem con ella, y la animó a que se presentara a las primarias en Madrid, en las que podían participar 2.190 militantes y simpatizantes. Y las ganó. La exdirigente de IU y actual coordinadora de campaña de Uralde logró 378 votos. En número de sufragios le siguió la exdiputada de IU Reyes Montiel, pero como Equo impone la lista cremallera, ocupará el puesto 4, tras Alejandro Sánchez, exdirector de SEO/Birdlife.