En 1986, Izquierda Unida nació al calor de la Plataforma contra la OTAN. Hoy, 24 años después, con un capitalismo tocado por una crisis salvaje, IU ha ideado un nuevo motor para poner en marcha la refundación de la izquierda y la convergencia con otros grupos: una Ley de Garantía de los Derechos Sociales y Económicos Fundamentales. Esta ley, o 'propuesta de diálogo de IU con la sociedad civil', pretende la denuncia del 'incumplimiento sistemático' de aquellos avances recogidos en la Constitución de 1978 y la búsqueda de una salida de izquierdas a la crisis 'frente a las dinámicas de exclusión'.

IU había adelantado esta ley, pero no la había ligado a su renacimiento. Ahora ha hallado el norte de su refundación, el hilo conductor, 'movilizando a la ciudadanía en la defensa de sus derechos'. Así figura en un documento interno de ocho páginas al que ha tenido acceso Público y que previsiblemente refrendará mañana el Consejo Político Federal, el máximo órgano de dirección. El texto, auspiciado por el dirigente Enrique Santiago, considera que la crisis ha hecho más 'dramático' aún el vaciamiento de la Carta Magna.

IU encabezará la protesta de los que reivindican el despliegue real de la Constitución, la Declaración de Derechos Humanos de la ONU y la panoplia de tratados internacionales que España ha suscrito: el derecho a un trabajo bien remunerado, a la vivienda digna, a unas pensiones adecuadas, la obligación del Estado a promover el progreso social y el pleno empleo, el fortalecimiento del respeto a las libertades fundamentales...

Se trata de un proceso de convergencia, que agite la conciencia de los activistas sociales y de la sociedad civil. 'No planteamos que asuman nuestra propuesta, sino que construyamos juntos', desarrollando 'nuevas formas de democracia participativa', especifica el texto.

A partir de ahora, se pondrán en marcha foros formados por gente de dentro y fuera de IU que discutirán propuestas en cada materia (economía, universidad, cultura, feminismo, ecologismo, movimiento republicano, de cristianos de base, de gays, inmigración...).

En mayo se llegaría a un congreso estatal de foros, donde se remataría el programa político. Después, la asamblea de refundación de IU, para la que no hay fecha cerrada. Para 'evitar especulaciones', dice el texto, se mantiene la previsión de julio de 2010, pero 'no se cierra la posibilidad de, si fuera necesario', posponerla al otoño, como avanzó Público.

El alcance sigue sin quedar claro. IU trabajará para que los activistas se sumen a sus filas y, 'si es posible', a la dirección. Pero no es seguro. El texto recoge asimismo las dificultades: la distinta implicación de los territorios y la existencia de 'profundas crisis internas' en algunas federaciones. El optimismo radica, con todo, en el 'éxito político y de convocatoria' del acto de lanzamiento de la refundación, el pasado 28 de noviembre en Madrid.

Resolución de conflictos
Mañana se aprobará el informe de gestión del coordinador, de 17 páginas, y al que ha tenido acceso este diario. En él, Cayo Lara insta a la resolución de las peleas internas antes del 30 de abril. Riñe a los dirigentes de las federaciones en conflicto porque tienen 'mayor responsabilidad' a la hora de buscar soluciones a las crisis.

Nuevo modelo productivo
IU arranca la “segunda fase” de alternativas frente a la crisis, contra la Ley de Economía Sostenible del Gobierno y las propuestas del PP, que 'interpreta a la perfección' las inquietudes de la CEOE. Para eso, organizará los días 6 y 7 de febrero unas jornadas sobre el sistema productivo. Una propuesta será “penalizar el modelo de salarios bajos, precariedad y desregulación”. 

Replantear alianzas
Lara deja claro que IU “no debe permitir” nunca que gobierne el PP. Pero también cree que hay que definir “modelos de relación con el PSOE mucho más elaborados y matizados”: cogobernar con los socialistas, apoyo externo, oposición... Es decir, abrir el abanico de posibilidades, establecer una relación 'laica' con los socialistas, sin complejos.

Mejorar la comunicación
El Consejo aprobará este sábado la creación de un Gabinete de Comunicación permanente, presidido por Lara, para 'mejorar la proyección pública' de las alternativas de IU. Además, los dirigentes se reunirán con todas las federaciones periódicamente para que el discurso penetre en todo el tejido de IU.