El portavoz del grupo socialista en el Congreso, José Antonio Alonso, ha dejado claro que el PSOE rechaza 'totalmente' las declaraciones del Papa sobre el uso del preservativo, aunque no cree que el Parlamento sea el lugar adecuado para reprobarlo por ello, como plantea una iniciativa de IU-ICV.

Alonso ha dado a entender que los socialistas no apoyarán la propuesta de IU-ICV que debatirá la Comisión de Cooperación y en la cual se propone a la Cámara que emita una 'queja formal' por las manifestaciones de Benedicto XVI sobre la utilización del condón.

Como el Papa declaró en su última visita a África que 'no se puede superar el sida con la distribución de preservativos', IU-ICV registró una propuesta que superó el 'filtro' de la Mesa del Congreso, aunque con la oposición de dos de los cuatro miembros del PP en este órgano, Ignacio Gil Lázaro y Jorge Fernández Díaz.

Desde el grupo socialista, José Antonio Alonso ha explicado que los socialistas rechazan 'frontalmente' las palabras del Papa por cuanto el sida afecta a millones de personas y el preservativo es un 'método eficaz' para prevenirlo, de manera que muchos infectados por el VIH no lo estarían si lo hubieran usado en sus relaciones sexuales.

'Creemos que debe hacerse justo lo contrario que lo que ha dicho el Papa', ha apuntado el portavoz.

Sin embargo, Alonso ha apuntado a renglón seguido que la Constitución establece que las funciones del Parlamento son elaborar las leyes y controlar la acción del Gobierno, por lo cual 'no es posible en el Parlamento reprobar a un jefe de Estado extranjero'.

En esta línea, ha recordado que la política exterior está dirigida por el Ejecutivo, y por ello ha pedido que, 'cada uno con su papel', se respeten las funciones del Parlamento y el Gobierno.

'Haremos compatible nuestra posición con ambos criterios', ha añadido respecto al momento en que se debata la iniciativa.

Por su parte, la portavoz del grupo popular en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, ha dicho que tiene 'clarísimo' que su grupo votará en contra de la propuesta de IU-ICV.

Y lo hará porque el PP, ha explicado, no está de acuerdo con que en la Cámara Baja se debatan o reprueben opiniones de ninguna persona, incluidas las de jefes de Estado, que son 'libres' de opinar lo que quieran.

El presidente de la Conferencia Episcopal el cardenal, Antonio María Rouco Varela, protestó ante el propio presidente del Congreso, José Bono.