Una supuesta pelea conyugal podría costarle muy cara a José Manuel Regadera, juez decano de Barcelona. Tras el cruce de demandas con su mujer la notaria María Rosa I. M. por un presunto delito de lesiones en el ámbito doméstico, su carrera judicial podría haber llegado a su fin.

Según fuentes próximas a Regadera, el todavía juez decano se está planteando la posibilidad de abandonar su cargo. El magistrado no quiere tomar la decisión de forma precipitada, aunque sabe que su continuidad en el cargo resultaría difícil de entender para la opinión pública a la vista de la relevancia mediática que tuvo su supuesta disputa del jueves por la noche con su mujer.

'Debe ser una decisión meditada, no creo que sea algo sobre lo que haya que tomar una decisión de un día para otro', manifestó Regadera en declaraciones a Efe. Asimismo, explicó que su posible dimisión es una cuestión sobre la que debe 'meditar y hablar con los compañeros' y que, a su juicio, 'depende de muchas cosas'.

Además de renunciar a este cargo, Regadera podría verse forzado a abandonar su carrera como juez. Si fuera condenado a los nueve meses de prisión que pide para él la Fiscalía, podría perder para siempre su condición de juez, ya que así lo prevé la ley en los casos de delitos dolosos que superen los seis meses de prisión.

El juez ni siquiera tiene la posibilidad de pactar con la Fiscalía una hipotética rebaja de la condena a cambio de admitir los hechos que se le imputan, ya que la petición de pena de nueve meses es la mínima prevista para los delitos de lesiones cometidos por el hombre en el domicilio familiar en el caso de la mujer, esta pena mínima es de siete meses y 15 días, la que el fiscal pidió para la mujer del juez.

Así las cosas, de ser declarado culpable, la única salida del juez para mantener su cargo pasaría por ser condenado a una pena de trabajos en beneficio de la comunidad en vez de ir a prisión.

La consellera de Justícia, Montserrat Tura, expresó ayer sus dudas sobre la continuidad de Regadera como juez decano de Barcelona. Tura afirmó que Regadera deberá 'explicar' su postura sobre la violencia doméstica, ya que, como juez, se enfrenta a casos similares 'en otros hogares'.

La consellera manifestó que los representantes de la judicatura, como los políticos o las personas que ocupan un cargo público, son vistas por la sociedad 'como referentes', por lo que aseveró 'este caso es doblemente lamentable' y 'como poco es un mal ejemplo'.

Una elección ajustada
José Manuel Regadera, miembro de la conservadora Asociación Profesional de Jueces, es juez decano de Barcelona desde marzo de 2008, cuando se impuso por un solo voto de diferencia a su predecesora, María Sanahuja, de Jueces por la Democracia (JD). Regadera se benefició de la segregación en el voto entre los progresistas, que presentarondos candidaturas.

Conflicto por el traslado
El caballo de batalla de Regadera desde que asumió el cargo ha sido el traslado a la nueva Ciudad de la Justicia, que empezará a hacerse efectivo en mayo con los juzgados de menores y por el que ha mantenido diversos rifirrafes con el Departament de Justícia. A Regadera le quedan aún tres años completos de mandato.

El nuevo decano, en un mes
Si finalmente Regadera decidiera dimitir, algo a lo que no está obligado, los juzgados de Barcelona podrían disponer de un nuevo decano en el plazo de un mes, dado que ese es el tiempo estimado para este trámite.