Empujada por el viento de consenso que sopló en el congreso federal del pasado noviembre, Izquierda Unida-Comunidad de Madrid (IU-CM) abre hoy su VIII Asamblea Regional, de la que saldrá investido nuevo coordinador Gregorio Gordo, de 50 años y diputado en el Parlamento autonómico.

Si no hay imprevistos, IU-CM, la segunda federación más grande de IU (11.000 afiliados), celebrará el cónclave más tranquilo de toda su historia. Las tres grandes familias –la mayoría que comanda el edil Ángel Pérez, los comunistas afines a Enrique de Santiago y el sector posibilista que lidera Inés Sabanés– presentarán mañana una lista unitaria. Los 765 delegados votarán, previsiblemente, una única candidatura para renovar el Consejo Político Regional, el máximo órgano de dirección entre asambleas.

No obstante, podría concurrir una segunda lista, muy minoritaria (el 10%), que representa al aparato del Partido Comunista de Madrid, dirigido por Juan Ramón Sanz. Las negociaciones para que esa ala más ortodoxa se sume a la plancha única continuarán hoy. Si los disidentes no alcanzan el 10% de avales, ni siquiera tendrán opción a competir.

Queda por acordar la distribución de sillas de la ejecutiva y el puesto que ocupará Gordo en la Asamblea de Madrid. Todo apunta a que se convertirá en el presidente del grupo parlamentario. La mayoría, en aras del consenso, ha decidido no arrebatar la portavocía a Sabanés, ya que 'ha ejercido un excelente papel en los últimos años, y es preferible no enturbiar la calma', relata un dirigente.

Los negociadores de cada sector se felicitaron ayer del pacto y de que haya “debate político y pluralidad”, indicaron.

IU-CM llega a su VIII Asamblea sin coordinador. Hace un año dimitió por enfermedad Fernando Marín. De forma interina, asumieron el liderazgo Gordo, hasta ahora coordinador de la Presidencia; la responsable de Comunicación, Lidia Fernández; el de Finanzas, Pedro Orgaz, el de Política Institucional, Antero Ruiz, y los portavoces en la Asamblea y el Ayuntamiento, Sabanés y Pérez.