Un 44,3% de los parados todavía no recibe ningún tipo de prestación

MADRID.- El Gobierno ha sacado pecho este miércoles por el descenso en el número de desempleados en 2016 con respecto a 2015, pero algunas de las cifras difundidas por el Ministerio de Empleo contrastan con su triunfalismo. La cobertura del sistema de protección por desempleo en noviembre de 2016 fue del 55,7 %, 0,4 puntos superior a la del mismo periodo del año anterior. Esto significa que el número de parados que no cobraba en ese mes ninguna prestación por desempleo descendió del 44,7%, pero todavía un 44,3 % no reciben ayudas. 

De acuerdo con los datos publicados hoy por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, a finales de noviembre 1.990.843 personas se beneficiaban de estas ayudas, lo que significa un descenso del 7,9 % respecto al mismo mes del año anterior.

Del total de beneficiarios, 870.352 personas cobraban el subsidio por desempleo (9,8 % menos); 756.558, la prestación contributiva (6,9 % menos); 223.859, la renta activa de inserción (4,9 % menos); 119.311, el subsidio para eventuales agrarios (3,9 % menos); y 20.763, el programa para parados de larga duración con cargas familiares (18,9 % menos).

En noviembre bajó también el gasto en prestaciones para desempleados con respecto al mismo periodo del año anterior. Fue de 1.531,4 millones de euros, es decir, un 8,4 % menos que durante el mismo mes de 2015.

La cuantía media bruta de la prestación contributiva percibida por beneficiario fue de 810,6 euros, lo que supone un descenso de 3,2 euros respecto a la del mismo mes del año anterior.

El número de solicitudes presentadas en todo el territorio nacional registradas en noviembre ascendió a 707.261, lo que representa un 1,2 % más que en el mismo periodo de 2015.

Las altas tramitadas fueron 669.141, un 0,9 % más frente a noviembre de 2015.

En relación con el total de beneficiarios de prestaciones por desempleo, los extranjeros representaron el 9,9 %, con un gasto de 133,2 millones de euros, un 4,2 % menos que en el mismo mes de 2015.

Esta cuantía supuso un 8,7 % del gasto total de las prestaciones por desempleo.