El Fondo Monetario Internacional (FMI), la Comisión Europea y el Banco Central (BCE) han dictaminado que las reformas financieras emprendidas por España a cambio del rescate bancario de 40.000 millones concedido por el Eurogrupo mantienen un 'buen ritmo', pero han reclamado al Gobierno de Mariano Rajoy 'más avances' en materia de ajuste presupuestario y reformas estructurales a fin de consolidar la estabilización de la economía.

Además, el Ejecutivo español debe extremar la vigilancia sobre los bancos que han recibido ayudas públicas europeas para garantizar que cumplen los planes de reestructuración pactados con Bruselas y garantizar un plan de negocios 'sólido' y 'creíble' para el banco malo que gestiona los activos inmobiliarios tóxicos (Sareb). Estas son las conclusiones de los inspectores de la troika -formada por la Comisión, el BCE y el FMI- que visitaron Madrid del 28 de enero al 1 de febrero para verificar por segunda vez si España cumple las condiciones recogidas en el memorándum del rescate bancario.

'La conclusión con éxito de la segunda misión de revisión a España demuestra que la reparación y reforma del sector financiero español mantiene un buen ritmo', ha celebrado el vicepresidente de la Comisión y responsable de Asuntos Económicos, Olli Rehn. 'La bienvenida caída de los costes de la financiación de la deuda soberana en los últimos meses -ha proseguido Rehn- refleja la creciente confianza de los inversores en las medidas adoptadas en España y en la eurozona para abordar tanto los síntomas, como las causas de la crisis'. 'Para aprovechar estos importantes progresos y garantizar que estos beneficios lleguen a la economía real, resulta fundamental que España mantenga su atención tanto en unas finanzas públicas saneadas como en la aplicación decidida de reformas económicas', ha resaltado el alto funcionario de la UE.

En este sentido, el informe de la troika alerta de que 'la situación económica sigue siendo muy difícil, con un nivel de paro muy alto y creciente, contracción del PIB y una necesidad de reducir grandes reservas de deuda interna y externa'. Por ello, los inspectores insisten también en que 'siguen siendo necesarios más avances en la consolidación de las finanzas públicas -incluyendo el refuerzo del marco institucional- y en la rápida conclusión y aplicación de la agenda de reformas estructurales'.

Finalmente, los inspectores elogian también los 'progresos significativos' en la reforma de la ley de cajas de ahorro, la revisión de los procedimientos de supervisión del Banco de España y las modificaciones en el marco que regula la concentración de crédito y las provisiones, así como el refuerzo del registro de crédito. Estas reformas son 'pasos esenciales' para lograr 'el sector financiero responsable y saneado que España necesita con el fin de garantizar el acceso al crédito a las familias y las empresas. Este proceso debe completarse en el plazo previsto y aplicarse con rigor', ha dicho el vicepresidente económico de la Comisión. Los hombres e negro volverán a Madrid en mayo de 2013 para realizar su siguiente evaluación.