Los gobiernos de España y de Arabia Saudí firmaron hoy en Riad el contrato por el que un consorcio español construirá una línea de alta velocidad que unirá las ciudades santas del islam, La Meca y Medina, con la ciudad portuaria de Yeda. La firma del contrato estaba prevista para noviembre, pero se ha esperado a que se constituyera el nuevo Gobierno. El proyecto se debe al anterior Ejecutivo, ya que llevaba cinco años larvándose, y ahora el actual recoge los frutos.

El consorcio español está encabezado por Renfe y Adif, además de el fabricante de trenes Talgo, y la constructora OHL. Lo completan Indra, Cobra (filial de ACS) y Copasa, además de Consultrans, Imathia, Dimetronic e Inabensa y dos empresas saudíes.

En total, el contrato supone una inversión de 6.736 millones de euros para construir 450 kilómetros de vías que unirán Medina y La Meca para que circulen los trenes a 320 kilómetros por hora. El consorcio también se encargará de mantener y explotar el servicio durante 12 años. Será Talgo la proveedora de los trenes, con el modelo conocido como El Pato, que ya circula entre Madrid y Valladolid y Madrid y Valencia. La empresa cifró en 2.007 millones los ingresos que le reportará el contrato. Los ingresos para Renfe y Adif se estiman, respectivamente, en 672 y 400 millones.

La confirmación del contrato del llamado "AVE de los peregrinos" ha sido incluso agónica para las empresas españolas. Los rumores se desataron en verano. Pero los tiempos de Arabia Saudí no son los que rigen en Europa. Hubo que esperar hasta el 26 de octubre pasado para que el rey Abdullah ratificara que el consorcio español vencía a su contrincante francés, encabezado por Alstom y la SNCF (la Renfe de Francia). Hasta el último momento, el Gobierno de Nicolas Sarkozy maniobró para intentar que la balanza se inclinara hacia su lado. Pero falló. A favor de España pesó que su tecnología en alta velocidad es puntera a nivel internacional y más moderna que la francesa. España es el país europeo con más kilómetros de AVE en funcionamiento, 2.600, por delante de Francia y de Alemania.

Durante el acto de la firma del contrato, la ministra de Fomento, Ana Pastor, calificó el acuerdo de "histórico" y de "ejemplo de colaboración entre el sector público empresarial y las empresas privadas", algo que ayudará a dar proyección internacional a España. Su homólogo saudí, Jubarah bin Eid Al-Suraiseri, puso de manifiesto la contribución al desarrollo estratégico de Arabia Saudí que tendrá este proyecto al "reforzar la competitividad del país y dar mayores servicios a sus viajeros".