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Pau entra en una zona mítica

Gasol debuta hoy con los Lakers con la obligación de volver a dar equilibrio al juego interior del equipo angelino

MIGUEL ALBA

La NBA es un cúmulo de iconos. El 23 de Jordan, el sky hook (gancho al cielo) de Abdul Jabbar, el parqué vendido en porciones del Boston Garden, la generación de los Bad Boys de Detroit, las Twin Towers (Sampson-Olajuwon) de Houston, las cinco camisetas retiradas de Wilt Chamberlain... Hasta hoy, Pau estaba más cerca de integrar el Horror of Fame que de intentar opositar al Hall of Fame. Sin embargo, cuando hoy empiece a llenar de contenido al 16 de los Lakers ante los Nets (01:00, Canal +), Pau formará parte de un grupo acostumbrado a otras dinámicas. Las que le exige el pasado colgado del techo del Staples Center. Porque en los Lakers, sólo se toma en cuenta a la excelencia. Y Pau se mueve por un territorio en el que algunos Laker aprovecharon el baloncesto para vivir su particular sueño americano.

Entre el 13 de Wilt Chamberlain y el 33 de Kareem Abdul Jabbar, los récords se amontonan mientras creaban la ecuación exitosa del equipo de Hollywood: ‘bajito' de calidad (West y Magic Johnson) y centímetros de intimidación. El ciclo volvió a repetirse con Kobe y Shaquille (tres anillos consecutivos, 2000 a 2002) hasta que en el vestuario se hizo insoportable la convivencia de sus egos. Hoy los Lakers se aferran a los 215 centímetros de Gasol para evitar que la muñeca de Kobe no llegue exhausta a los play off. El momento de la excelencia y del que Pau tiene tan malos recuerdos en Memphis.

Los gestos de Jackson

'Muchos dicen que con Pau hemos ganado en fortaleza defensiva, que también, pero no nos debemos olvidar de sus 19 puntos de media por partido', enfatiza Phil Jackson, que necesita que Gasol entre rápido en la dinámica de grupo. Sus gestos en Washington son la mejor prueba. Después de varios tiempos muertos, el técnico que convirtió a los Bulls de Jordan en una dinastía, se giraba hacia Pau y le explicaba unos sistemas de los que tiene que sentirse protagonista.

Gasol, vestido con una americana prestada en el banquillo para cumplir con el código de conducta que exige la NBA, asentía como si estuviera escuchando el mítico grito deffense, deffense (defensa, defensa) que puso de moda el Forum en los duelos de la generación de Jabbar, Magic, Worthy, Rambis, Scott o AC Green con los Celtics. Desde entonces, muchos apellidos han vivido en una zona con demasiadas historias. Vlade Divac, cuando, en 1989, se convirtió en el primer europeo en fichar por Lakers, aseguró que 'hay momentos en los que siento que no estoy solo en la zona, que me acompañan los grandes'. Gasol vive, desde hoy, entre ellos.

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