La jueza Mercedes Pérez Barrios puso ayer fin a semanas de especulaciones sobre las pruebas aportadas por la Guardia Civil contra  Marta Domínguez en la Operación Galgo. En un auto del 25 de enero, conocido ayer, la magistrada reitera la imputación contra la atleta por los delitos de tráfico de sustancias ilegales y contra la Hacienda Pública, aunque los desconecta de Eufemiano Fuentes y Manuel Pascua. Y saca a la luz otros datos desconocidos hasta ahora que no empeoran la situación judicial de la palentina (sólo es delito suministrar las sustancias prohibidas, no consumirlas) pero sí ensucian su reputación deportiva: Marta recibió EPO y trembolona, ambos productos dopantes, “con el fin de aumentar su rendimiento deportivo”.

Antes del 17 de julio de 2010, Alberto García suministró EPO a la palentina, que se colgó la medalla de la plata en 3.000 obstáculos el 30 de julio en los Europeos de Barcelona. Según el auto, su entrenador, César Pérez, también suministró a Domínguez sustancias ilegales, en su caso trembolona, un esteroide, en fecha no determinada pero siempre antes de septiembre de 2010.

La jueza Pérez Barrios también hace referencia a la incautación de DMTH-2 al entrenador en un control de carretera el 13 de julio, las dos ampollas a las que la Guardia Civil cree que Domínguez se refiere como los “pendientes de platino” en un pinchazo telefónico y en las que un laboratorio de Colonia (Alemania) ha encontrado anabolizantes, según adelantó Público el miércoles.

Albert Soler, director general de Deportes, reconoció que el CSD no ha pedido aún las pruebas a la jueza para depurar las responsabilidades deportivas de la atleta antes estas revelaciones judiciales. “El proceso no ha terminado y nosotros, asesorados por el abogado del Estado, seguimos a la espera. Sólo pediremos las pruebas a la jueza si creemos que son susceptibles de sanciónadministrativa”.

La atleta aparece a la vez como receptora y suministradora de anabolizantesPero hay más. Ante la Justicia, Domínguez deberá responder por haber entregado presuntamente trembolona a su supuesto suministrador de EPO, Alberto García, a través del mánager de la atleta, José Alonso Valero, el 17 de noviembre de 2010. Y también de haber suministrado “sustancia dopante” a Eduardo Polo, su liebre, con la colaboración del fisioterapeuta palentino Manuel Corral, ahora también imputado.

Todos los citados, más dos farmacéuticas, madre e hija, que entregan “sin receta” a Domínguez las sustancias que esta luego entrega a su liebre, componen la lista de imputados en los tres procedimientos abiertos, con foco en Palencia, y que la jueza ha desconectado ahora de la presunta trama de dopaje encabezada por Eufemiano Fuentes y Manuel Pascua. “Desde el inicio cabía apreciar la falta de relación entre sí de los autores de alguna de las conductas investigadas, sin embargo se hacía necesario practicar una mínima instrucción judicial”, argumenta la jueza al explicar la separación de las investigaciones.

El abogado de Marta Domínguez señaló ayer a Público que “la trembolona es lo que se ha estado diciendo que si era o no era el famoso oro y Alberto ha declarado ante la juez que eso no era trembolona. Y respecto a la EPO, Alberto nunca se lo ha sumistrado a Marta: en el proceso no hay ni una sola prueba que acredite eso”.

Aunque separadas de las investigaciones relacionadas con Marta, se mantienen los cargos contra la red integrada por los hermanos Fuentes, que abastecían de fármacos prohibidos y supervisaban las autotransfusiones sanguíneas de los atletas entrenados por el técnico Manuel Pascua.

En total, por presuntos delitos de dopaje, y en algunos casos contra la Hacienda Pública, y un delito de expedición ilegal de medicamentos y uno de falsedad en documento oficial, en este momento siguen 17 imputados (16, sin contar al fallecido Alberto León).