Escritura

Zambrano valora el proceso y la aparición de su discurso durante su misma elaboración. 'Mas no es esto, este discurrir como añadido o sobrepuesto al curso espontáneo del pensamiento, el íntimo suceso cuando se escribe. El verdadero suceso ha de buscarse en el escribir sin sombra de temor -ni de esperanza- de que vaya a ser publicado'.

Felicidad

El hombre que ha perdido la felicidad vuelve la vista atrás para revivir su pasado 'a ver si sorprende el instante en que se rompió su dicha'. La memoria como la felicidad a la desesperada: 'El que no sabe lo que le pasa hace memoria para salvar la interrupción de su cuento, pues no es enteramente desdichado el que puede contarse a sí mismo su propia historia'.

Historia

'El tener lo que se ha llamado conciencia histórica' es la característica del hombre de nuestros días. El hombre ha sido siempre un ser histórico. Mas hasta ahora, la historia la hacían solamente unos cuantos, y los demás sólo la padecían', escribe María Zambrano. La autora coloca por delante del tiempo histórico al ser humano: la historia ahora 'la hacemos entre todos', también 'la sufrimos todos'. Y, desde luego, 'todos hemos venido a ser sus protagonistas'. El hombre de hoy, dice, vive la historia en un sentido horizontal, en comunicación con los acontecimientos de los países más lejanos al suyo. 'Es propio del hombre viajar a través del tiempo', resume Zambrano.

Occidente

'La crisis de Occidente ya no ha lugar apenas. No hay crisis, lo que hay más que nunca es orfandad. Oscuros dioses han tomado el lugar de la luminosa claridad []. Todo está salvado y al par vemos que todo está destruido o en vísperas de destruirse'. Zambrano se mueve entre la frustración por no haber visto consolidado el proyecto de una nueva cultura y la esperanza de que renacerá. Uno de los puntos de arranque de esta concepción de crisis será Ortega y Gasset.

Religión

Para Jesús Moreno, Zambrano 'es una cristiana muy singular, que aporta un diálogo intercultural tan inteligente con otras religiones'. 'Quien esto escribe ha ido desde el comienzo de su vida, antes que de un modo consciente, a la búsqueda de una religión de régimen no sacrificial', aclara. Zambrano analiza la nueva religión sin dios, la religión del ser humano a la que ha llegado tras su emancipación de la divinidad. Pero 'el hombre ha existido cuando, frente a sus dioses, ha ofrecido resistencia'.

Tiempo

La paradoja de la inmensidad del tiempo: apresa y limita. El tiempo es lo que no nos abandona. 'Y el tiempo media entre la muerte y el ser que todavía tiene que vivir y ver, que recibir y ofrecer, que consumir y consumirse. De la muerte el tiempo algo tiene y algo trae'. Y el tiempo se ofrece a la verdad: 'Y como al fin el tiempo se mueve, hace moverse al ser humano; moverse es hacer algo, hacer algo de verdad, tan solo'.