'Dentro de 20 años nadie se acordará de Alejandro Sanz, como nadie se acuerda ahora de Pablo Abraira o Daniel Velázquez, que eran los Sanz de los setenta'. Las declaraciones de Fangoria a 'PÚBLICO' han provocado la reacción del cantautor madrileño, quien acusa a Alaska y Nacho Canut de 'fijación, odio y rencor' hacia su persona.

A través de su cuenta en Twitter, el autor de Corazón partío expresa su desconcierto ante las declaraciones de Fangoria ('no sé cuál es el motivo por el cual me odiáis tanto'), les recuerda la insistencia en los reproches ('ya hace años que venís criticándome muy duramente sin haber hecho nada (creo) para merecerlo'), reconoce cierto asombro ('si os digo la verdad me sorprende vuestra fijación conmigo'), combina la modestia con el reconocimiento ('puede que yo no os guste, sin embargo yo a vosotros os admiro y os respeto') y desvela sus aspiraciones ('solo deseo que se vaya ese rencor de vuestros corazones y podáis vivir en paz'). Sanz no da puntada si hilo y cierra su mensaje con una buena carga de ironía: 'Por lo demás yo sigo mi camino, que gracias a Dios está lleno de felicidad. Siento que eso os moleste tanto. Salud y afinación (sic) para tod@s'.

En la entrevista que Fangoria concedió a este periódico el pasado día 21 de octubre habló sin pelos en la lengua sobre el paso del tiempo y de cómo afecta a los artistas. Ellos mismos cumplían 20 años en la industria musical y se han hecho el harakiri musical sacando el álbum 'El paso trascendental del vodevil a la astracanada. Canciones ayer y hoy', una recopilación de versiones de las viejas canciones de Dinarama y Pegamoides, cosa que durante años se han negado a hacer por no convertirse en una orquesta.

Excusas aparte de por qué ahora sí podían hacerlo sin temor a acabar en cualquier verbena de pueblo, durante la charla, tanto Alaska como Nacho Canut hicieron alusión a varios grupos musicales como El Canto del Loco o La Oreja de Van Gogh y la supuesta fragilidad de sus carreras. Ha sido Alejandro Sanz, inmerso en su 'Paraíso Express', el que se ha tomado más en serio las declaraciones del dúo.