Público
Público

Montilla apela al legado de Tarradellas para "hacer Estado" con rigor y eficacia

EFE

El presidente catalán, José Montilla, se ha inspirado en el legado de Josep Tarradellas en su propósito de "combatir" la denominada "crisis de la política", que cree que debe hacerse con una acción de gobierno llena de rigor y eficacia porque "es hora de autogobernarnos, de hacer Estado, de hacer Cataluña".

Montilla ha clausurado así el acto de homenaje que la Generalitat ha realizado hoy a Tarradellas en el 30 aniversario de su regreso a Cataluña desde el exilio en Francia, lo que simbolizó el restablecimiento de la Generalitat tras el franquismo y cuya máxima expresión fue su frase "Ja sóc aquí".

Ante un Salón Sant Jordi del Palau de la Generalitat repleto de políticos actuales y de la Transición, como el ex ministro de Gobernación Rodolfo Martín Villa y media docena de consellers de la etapa Tarradellas, como Jordi Pujol, Montilla ha hecho una relación de las "lecciones" del president fallecido, del que ha recordado que consiguió restaurar la Generalitat en un "reconocimiento a las instituciones republicanas" y de forma previa a la Constitución.

Tras hablar del "profundo significado de reparación moral de la Cataluña vencida", Montilla ha hecho referencia a la Cataluña del futuro "inspirándome -ha dicho- en una de las orientaciones que presidió la acción política del president Tarradellas".

"Nos gobernamos, nos queremos gobernar y nos volveremos a gobernar', decía el president Tarradellas, expresando la inequívoca voluntad de los catalanes de decidir sobre nuestros intereses colectivos", ha recordado Montilla, flanqueado por los consellers Josep Lluís Carod-Rovira y Joan Saura.

A partir de la "gran lección" de Tarradellas de considerar la Generalitat como "la expresión institucional de la voluntad nacional de Cataluña", Montilla ha admitido que debe hacer frente a la "paradoja" de disponer del máximo autogobierno y de "vivir un estado de ánimo colectivo que, por momentos, parece tentado a caer en el pesimismo".

Para revertir así la situación, Montilla ha abogado por lograr que la Generalitat sea la "institución más respetada" por su ejemplo de "rigor y de servicio público", porque pretende que se gestionen los grandes servicios públicos, como Renfe o el suministro eléctrico, con "criterios de eficacia, eficiencia, calidad y proximidad, sea quien sea el titular".

De esta forma, la inquietud ciudadana y política por las incidencias del servicio de Cercanías de Renfe en Barcelona ha planeado sobre el homenaje a Tarradellas.

"No es hora de vender humo. Es hora de gobernar. De autogobernarnos. De hacer Estado. De hacer Cataluña. No estamos hablando sólo de un derecho, sino de un mandato de nuestros conciudadanos y constituye nuestro deber como gobernantes", ha concluido Montilla, en un afirmación alejada de cualquier proclama independentista, ya que el presidente ha recordado previamente que "el Estado español es también el Estado de los catalanes".

Montilla ha recordado también que la Generalitat debe "fijar una estrategia nacional", orientar las relaciones con los ayuntamientos y estimular la iniciativa privada y social.

A partir de la "guía" marcada por Tarradellas, Montilla aspira a que la Generalitat obtenga plena "legitimidad" social y política, y sea "admirada" en el exterior por su "buenas prácticas".

Previamente a Montilla, el periodista y ex conseller de Tarradellas, Carles Sentís, ha destacado que éste quiso ser un presidente "de todos" los que vivían en Cataluña.

Al acto han acudido unas 300 personalidades, entre ellas los ex presidentes Pasqual Maragall y Jordi Pujol, y siete de los consellers de los gobiernos de unidad de Tarradellas, como el mencionado Pujol, Lluís Armet, Joaquim de Nadal, Ramon Espasa, Carles Sentís, Josep Maria Triginer y Josep Maria Bricall.

También han acudido al acto Martín Villa, y Salvador Sánchez Terán, ex gobernador civil de Barcelona, así como el hijo de Tarradellas, Josep.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias