Los bares y restaurantes esapañoles han echado a temblar. La caída del consumo, la reordenación de los chiringuitos de playa y la prohibición de fumar en todos los locales está ahogando aún más a un sector ya afectado por la crisis económica: la hostelería.

Según la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), más de 5.000 bares y restaurantes podrían cerrar sus puertas tras el verano ante esta situación. Para frenarlo, los autónomos solicitan que sean las propias comunidades autónomas las que estudien la ordenación de los locales de la playa y que no se modifique la Ley del tabaco.

'A la amenaza de cerrar los chiringuitos , se une la no menos grave de endurecer la Ley del tabaco con la prohibición de la venta y el consumo de este productos en los establecimientos públicos, siendo los hosteleros los más perjudicados por la misma', subrayó UPTA.

En este sentido, la Unión se mostró partidaria de que sean las propias comunidades autónomas las que estudien la reordenación de los chiringuitos, que emplean de forma directa a más de 40.000 personas, en relación a la Ley de costas. Asimismo, apuestan por que los gobiernos autonómicos estudien la adaptación de estas instalaciones a la normativa legal, teniendo siempre en cuenta las condiciones urbanísticas, medioambientales y socioeconómicas.

Pero la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos no tienen sólo propuestas en este ámbito sino también en relación con las nuevas medidas para limitar el uso del tabaco en los centros públicos. Y es que a su juicio, esta medida puede suponer el 'jaque mate definitivo' para la pequeña hostelería por la negativa repercusión que podría tener en los establecimientos.

Por ello, recordaron que la ministra de economía, Elena Salgado, aseguró hace tres años que la Ley del tabaco perduraría en el tiempo, por lo que muchos empresarios hosteleros decidieron invertir grandes cantidades en acondicionar sus locales para el cumplimiento de esta normativa.

'Lamentablemente, y en plena época de crisis, el Gobierno plantea que las inversiones producidas no puedan ni llegar a amortizarse y nos obsequia con un recrudecimiento de la ley que obligará a los hosteleros a acometer nuevas inversiones en terrazas climatizadas y licencias para las mismas', señalaron desde UPTA.

Y si finalmente se cumple el anuncio de la modificación de la Ley del tabaco, el colectivo de autónomos reclamó al Gobierno una serie de ventajas como la aplicación de un IVA super reducido, una fiscalidad especial para este sector con disminución de los módulos, medidas que ventajas que faciliten el abandono de la actividad y la jubilación anticipada. Además, pidieron ayudas directas para las obras e inversiones que supongan el cumplimiento de las nuevas normas que se establezca de ahora en adelante.