El Betis buscará mañana ante el Murcia, un resultado que confirme la reacción que ha experimentado en las dos últimas semanas, pese a que el rival se encuentra sumido en una espiral negativa que le ha llevado a ocupar puestos de descenso.

El triunfo ante el Real Madrid (2-1) y el empate posterior en Mallorca (1-1), unido al balance favorable a los béticos en sus confrontaciones con los murcianos, en primera división en su feudo, con siete triunfos y tres empates, por una sola derrota, son los argumentos a los que se quiere aferrar el equipo que dirige Paco Chaparro para lograr una victoria que se antoja imprescindible.

Además, los béticos, que ya en la primera vuelta lograron un empate en La Condomina, quieren aprovechar también la racha negativa del equipo que dirige el granadino Lucas Alcaraz, con un empate y seis derrotas en las últimas siete jornadas.

Chaparro no podrá contar con Doblas y Rivas, aún en proceso de recuperación de sus lesiones, y tampoco con el zaguero Nano, pese a que ya tiene el alta médica, pero está lejos del nivel físico de sus compañeros.

Por tercera semana consecutiva Chaparro confía en los mismos jugadores. Dieciocho convocados que repiten y de los que, previsiblemente, saldrá la misma alineación que en los dos últimos partidos.

El Murcia llega con Lucas Alcaraz ratificado como entrenador pero presionado por la situación del equipo.

El equipo murciano, que es el penúltimo clasificado con 23 puntos sumados en 25 jornadas de Liga, se encuentra a seis puntos de las posiciones que dan la permanencia y cualquier resultado que no sea el triunfo en Sevilla añadiría lastre a un barco que navega sin rumbo estable desde hace casi dos meses.

Sin embargo, el presidente de la entidad, Jesús Samper, dijo públicamente durante la semana que el club mantiene la confianza en Alcaraz y cargó más contra los futbolistas, a los que exigió un mejor rendimiento para sacar al equipo de la situación de grave crisis en la que se encuentra.

Precisamente para aislarse de la tensión que se respira en Murcia, la plantilla marchó ayer hacia Jerez de la Frontera, donde permanecerá concentrada hasta mañana.

Los únicos jugadores del primer equipo que no están en terreno gaditano son los defensas Juan Cruz Ochoa y el francés Stephane Pignol, el centrocampista marroquí Abderrahman Kabous y el delantero brasileño Fernando Baiano, los cuatro lesionados.

Por lo que respecta a la alineación, no se esperan demasiados cambios, aunque el centrocampista Jofre Mateu y el delantero hispano uruguayo Iván Alonso podrían tener su oportunidad tras disputar como suplentes el último encuentro, perdido por 0-1 ante el Valladolid.

El gol sigue siendo el principal problema del Murcia, que sólo ha conseguido 20 y lleva tres jornadas sin ver puerta y en los que perdió por la mínima (0-1 contra el Villarreal, 1-0 ante el Almería y el pasado domingo frente al Valladolid).

Alcaraz dijo antes de partir hacia Jerez que "se dan todos los alicientes para que el partido sea importante" y añadió que "esta semana, con todo el respeto para el Betis, que es un gran equipo, con un gran entrenador y grandes jugadores, nuestro rival somos nosotros mismos y tenemos que centrarnos en hacer las cosas bien y dejar de lado la tensión para así encontrar un punto óptimo de rendimiento".

Sobre el toque de atención dado por Samper, el técnico granadino dijo que "es normal y será un elemento más de motivación" y en relación a los cálculos para evitar el descenso a Segunda manifestó que "las únicas cuentas que nos valen son las de ganar ya un partido".

Alineaciones probables:

Betis: Ricardo, Damiá, Juanito, Melli, Fernando Vega; Rivera, Arzu, Capi; Edu, Pavone y Mark González.

Murcia: Notario; De Coz, Álvaro Mejía, Arzo, Paco Peña; Pablo García, Richi, Abel, Jofre; Iván Alonso y Goitom.

Arbitro: Pérez Burrull (Comité Cántabro)

Estadio: Manuel Ruiz de Lopera.