El ex presidente del Gobierno y anterior secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, se ha mostrado esta tarde parco de palabras a la hora de calificar la trascendencia de los trabajos de la Conferencia Política. 'Creo que va muy bien, los trabajos son muy interesantes', se ha limitado a decir antes de entrar en el salón de plenos donde iba a intervenir. El recinto registró una asistencia algo menor de la que acudió a presenciar a  Felipe González, que intervino en un acto previo.

Era la primera vez que Zapatero intervenía en un acto de carácter orgánico desde que abandonó la secretaría general del partido tras la llegada de Alfredo Pérez Rubalcaba en el Congreso de Sevilla celebrado en febrero de 2012. Sin embargo, su exposición inicial fue breve, apenas cinco minutos, siempre para referirse a su labor en promover derechos ciudadanos, especialmente en igualdad, mientras estuvo al frente del Gobierno (2004-2011).

Durante su participación también estuvo parte de la actual dirección del PSOE, con Elena Valenciano a la cabeza. Previamente, tanto él como Felipe González, mantuvieron un breve encuentro, por separado, con Alfredo Pérez Rubalcaba en uno de los despachos del recinto del cónclave. La presencia de mujeres en este acto fue mayor que en el acto anterior.

El ex presidente del Gobierno centró su exposición inicial —también la segunda— en destacar los esfuerzos de sus gobiernos en aumentar los derechos de las personas, especialmente las mujeres con la Ley de Igualdad, la primera que se promulgó en su mandato. 'Nada indigna más que el machismo criminal, la violación, el acoso y el dominio (del hombre sobre la mujer)', ha dicho nada más empezar a hablar.

Pese a considerar que se ha avanzado 'mucho' en este terreno, confesó que no quiere caer en su 'conocido optimismo, porque queda mucho por hacer cuando se ven las cifras de la OMS (Organización Mundial de la Salud)'. En otro momento, y sin salir de este carril, afirmó que 'en esto momentos no se puede ser socialista sin ser feminista, pero no siempre fue así', ha matizado. 'Ahora la igualdad es una referencia central del socialismo democrático como antes lo fue la defensa de los derechos de los trabajadores', ha agregado.

Junto a Zapatero intervinieron Consuelo López Uranga, directora de Intermón-Oxfam, Amelia Valcárcel, filósofa y catedrática de la UNED, y Zita Gurmai, presidenta de PES Women y eurodiputada. Fue precisamente la representante del partido socialista europeo quien hizo una defensa más encendida de los logros en materia de igualdad y de defensa de los derechos de las mujeres en España gracias a la legislación de Zapatero. La filósofa Valcárcel destacó la trascendencia de esa legislación 'para consolidar a las mujeres en la sociedad española y europea'.

Zapatero: 'No se puede ser socialista sin ser también feminista'

Zapatero no se extendió mucho más en medio de un ambiente en que no pocas intervenciones han insistido cuestionar decisiones durante su mandato como presidente del Gobierno. Desde la necesidad de pedir perdón por lo que se había hecho mal hasta proclamar la necesidad de rectificar, el catálogo de comentario ha sido extenso en boca de Elena Valenciano, Óscar López, Susana Díaz e incluso Javier Fernández.

Sin duda, Zapatero ha acudido a la cita de su partido con cierta incomodidad, aunque en ningún momento en las diferentes intervenciones se le ha citado expresamente como responsable. La única defensa que se ha hecho de su gestión ha sido en las palabras que ha pronunciado un estrecho colaborador suyo en Moncloa, Bernardino de León, al afirmar: 'Los socialistas debemos sacar pecho y sentirnos orgullosos por lo mucho y bueno que hemos hecho'. Fue en el acto de González.