No aceptó preguntas durante la presentación de su equipo de Gobierno. Desapareció durante tres semanas después del debate de investidura. Decidió no celebrar el debate del estado de la nación. Esquivó a los periodistas para evitar hablar de los recortes en Sanidad y Educación y compareció, de milagro -motivado por la presión mediática-, para explicar el rescate a la banca española. Desde aquel 10 de junio ya casi han pasado dos meses. 52 días en los que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha permanecido agazapado en el Palacio de la Moncloa sin ofrecer ruedas de prensa a los periodistas de los medios españoles, excepto si éstas servían para alabar al equipo olímpico español. Una tendendia que romperá este viernes, día en el que aprovechará la reunión del Consejo de Ministros para hacer balance de su gestión en el Ejecutivo.

En este tiempo, las dudas de la Eurozona sobre la competitividad económica de España y la presión internacional sobre el país no han dejado de aumentar. Su Ejecutivo, además, ha aprobado medidas de relevancia como la próxima subida del IVA, el tijeretazo a las prestaciones por desempleo y la eliminación de la paga extra de Navidad a los funcionarios. Todas ellas han tenido, además, su correspondiente protesta social.

Aun así, Rajoy sólo se ha atrevido a comparecer en el exterior y, en buena parte de las ocasiones, acompañado de sus homólogos internacionales. Este fue el caso de su visita a Roma o a Bruselas, donde acudió a una reunión del Consejo Europeo. Y este viernes, por fin, Rajoy volverá a plantarse frente a los medios españoles para 'repasar la actualidad económica del país, explicar las medidas acometidas por el Ejecutivo y avanzar las prioridades del Gobierno para los próximos meses', según informó hoy el Ministerio de Presidencia. 

Asimismo, durante el resto del mes de agosto, el jefe del Ejecutivo apenas se tomará un respiro, ya que ha citado a sus ministros otros dos viernes : los días 24 y 31. Con anterioridad a estas citas, Rajoy recibirá, mañana mismo, en el Palacio de la Moncloa, al primer ministro italiano, Mario Monti, y el día 14 viajará a Palma de Mallorca para el tradicional despacho estival con el rey en el Palacio de Marivent. Con esta agenda, las vacaciones de Rajoy serán mínimas, ya que, en principio, sólo tiene previsto desplazarse algún día a Galicia con su esposa y sus hijos.