El presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, ha querido dejar claro que Andalucía 'no son los ERE, ni unos señores que están hoy en la primera página de los periódicos, sino una tierra de primera, donde viven ocho millones de españoles, que quieren algo tan normal como que se gobierne bien, se les respete y se les dé soluciones a sus problemas'.

Durante su intervención en un mitin de campaña de las autonómicas celebrado en el Pabellón Municipal Rafael Florido en Almería, ante unas 4.000 personas, Rajoy se ha pronunciado así, en relación al ingreso en prisión del que fuera director general de Trabajo y Seguridad de Trabajo de la Junta Francisco, Javier Guerrero, por su vinculación con el caso de los ERE fraudulentos.

Para el presidente del Ejecutivo, esta es una de las cosas que deben motivar el cambio político a favor de los conservadores en los comicios andaluces. Subrayando que la comunidad 'tiene derecho a la alternancia', ha asegurado que el triunfo de su partido significará 'luchar contra el paro con decisión, entender, ayudar y dar horizonte de salida a los que no pueden trabajar'. 'El cambio es que se diga la verdad sobre Andalucía', ha reiterado.

Además, Rajoy asegura que si gana el PP en la región va a 'gestionar bien el dinero de todos, cuidar el dinero del contribuyente, respetar a los que pagan impuestos y cuidar bien de su dinero, porque cuesta mucho ganarlo', en contraste con el Gobierno del presidente de la Junta de Andalucía,  José Antonio Griñán. El apoyo a la agricultura, el turismo y la Educación han sido otras de sus promesas durante su discurso electoralista. 

Por su parte, el presidente del PP-A y candidato de la Presidencia a la Junta de Andalucía, Javier Arenas, ha considerado que la responsabilidad política por este asunto alcanza a José Antonio Griñán y a Manuel Chaves, anterior presidente de la Junta de Andalucía. Y, frente a el compromiso de PSOE en salvaguardar los derechos de los andaluces, ha destacado la importancia de que la Fiscalía Anticorrupción haya cuantificado el fraude por los ERE en 933 millones.

'Lo que se hacía era repartir en secreto el dinero a los amigos del poder y de eso tendrán que responder dos presidentes de la Junta', ha señalado Arenas, quien ha garantizado que si se convierte en el próximo presidente de la Junta ahorrará los 1.000 millones del fraude de los ERE 'porque nunca se volverá a repetir'. Ha indicado, además, que llevará una Ley de Hacienda Pública al Parlamento para que no se gaste ni un euro sin en el control de los funcionarios y ha dicho que su obligación es recuperar 'todo el dinero que se ha robado'.