España ya no es solo uno de los principales destino de sol y playa para turistas de todo el mundo,  sino también el destino preferido por los estudiantes europeos para realizar sus estudios o prácticas en empresas dentro del programa de intercambio Erasmus. Así lo demuestra el informe publicado hoy por la Comisión europea, que demuestra que, por delante de Francia y Reino Unido, España recibió más de 35.000 estudiantes Erasmus a lo largo del curso universitario 2009/2010.

Aunque las becas con las que se dota a los estudiantes españoles son las más bajas de toda la UE, con la intención de poder ofrecer un mayor número de plazas a cubrir, España es también el país que envía a más estudiantes a otros Estados miembros. El curso pasado fueron un total de 31.158 alumnos españoles los que pudieron disfrutar de las ayudas económicas para los estudios de intercambio  (concretamente 27.448 estudiantes) o para la realización de prácticas en empresas (3.710 becarios). Detrás de los españoles, franceses y alemanes, son los jóvenes que más salen de sus países para complementar su formación.

Según muestra el informe de la Comisión Europea, que España sea el país de la UE que menos dinero da a sus estudiantes como beca Erasmus, con unos 150 euros al mes frente los 254 que reciben de media en los demás países miembros, no es problema que frene las expectativas de los universitarios que suelen acudir a pisos compartidos y a trabajos en el extranjero para poder cubrir los gastos.

Un total de 213.266 estudiantes europeos  se beneficiaron del programa Erasmus durante el curso universitario del 2009/2010, un 7,4% más que el curso anterior. Un programa del que no solo pueden disfrutar los estudiantes, pues unos 37.776 profesores universitarios recibieron formación en el extranjero, sobre todo en países como Alemania, España e Italia.