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La Bienal de Venecia acoge el Pabellón Latinoamericano de las oportunidades

EFE

Unos 700 metros cuadrados encierran las ilusiones y las oportunidades de doce artistas de Latinoamérica que exponen lo mejor de sus obras en el Pabellón Latinoamericano de la 53 edición de la Bienal de Arte de Venecia, un espacio que hoy fue inaugurado en la ciudad de los canales.

Este pabellón, uno de los muchos que alberga la ciudad italiana, está promovido por el Instituto Italo-Latinoamericano (IILA), institución que desde 1972 participa en esta muestra internacional de arte, que este año cuenta con la presencia de 77 países.

El IILA promueve este espacio propio de arte contemporáneo de Latinoamérica con la intención de que suponga una rampa de lanzamiento para muchos artistas y para dar la oportunidad de estar en Venecia a todos aquellos países de la región que, de otro modo, no podrían acudir por su discreto presupuesto.

Así lo explicó en una entrevista con Efe la comisaria adjunta del pabellón, la italiana Alessandra Bonanni, la actual máxima responsable de lo que en él puede verse, después de que el pasado 11 de mayo falleciera la argentina Irma Arestizábal (1940-2009), encargada hasta ese momento de seleccionar y organizar las obras.

"Irma era una gran amiga para mí. Ha sido un gran honor poder llevar a buen puerto el diseño que ella realizó y que desafortunadamente no pudo ver completado. Su muerte ha causado una gran conmoción entre los artistas, que contribuyen ahora a esta atmósfera de solidaridad que se respira" en el pabellón, dijo Bonanni.

Aunque Arestizábal no ha podido llegar a presenciar la inauguración del pabellón en el que trabajó durante tantos meses, la argentina sigue muy presente en el espacio del arte latinoamericano en Venecia, pues ha sido retratada de espaldas por la peruana Sandra Gamarra en una de las obras expuestas.

Gamarra comparte este pabellón de tres salas con otros once artistas latinoamericanos, cuya obra queda recogida bajo el título de "Mundus Novus - Arte Contemporáneo de América Latina" y quienes mostrarán al gran público sus composiciones desde el próximo domingo hasta el 22 de noviembre dentro de la Bienal.

Estos artistas son Gastón Ugalde, de Bolivia; Alberto Baraya y Luis Roldán, de Colombia; Federico Herrero, de Costa Rica; Carlos Garaicoa y Ramsés Larzábal, de Cuba; Fernando Falconí, de Ecuador; Nils Nova, de El Salvador; Darío Escobar, de Guatemala; Paul Ramírez Jonas, de Honduras, y Raquel Paiewonsky, de República Dominicana.

Todos ellos dan muestra, una vez más, de la poca pintura que ofrecerá al público esta Bienal de Arte y la gran cantidad de instalaciones artísticas menos tradicionales que pueden verse ya desde ayer en los tres días de presentaciones que concluirán mañana.

"Si hasta el propio (director de la Bienal, Daniel) Birnbaumm llegó a decir que bastaba ya de vídeos y de composiciones audiovisuales", comenta Bonanni entre risas.

En el Pabellón Latinoamericano pueden verse desde las composiciones textiles del boliviano Ugalde ("Marcha por la vida", 1992-2009), muy propias de los tejidos de su país, hasta los edificios de papiroflexia levantados por el cubano Garaicoa ("Bend City", 2008).

Y todo, sin olvidar los neumáticos de bicicleta del guatemalteco Escobar ("Kukulkan", 2009) o las fotografías del propio pabellón, cuando estaba vacío, del salvadoreño Nova ("Después y antes", 2009), una de las obras, según Bonanni, que más "impactan" a quienes han acudido hasta el momento a la vista previa.

"Todo el pabellón tiene una armonía muy particular", comenta la comisaria adjunta mientras muestra orgullosa la exposición y se para a charlar con los artistas que han decidido echar un vistazo a las propuestas del arte contemporáneo latinoamericano.

El IILA cuenta además con otra exposición, también inaugurada hoy, en la Facultad de Economía de la Universidad Ca'Foscari de la ciudad de los canales, con la que se quiere rendir un homenaje al Museo de Arte Contemporáneo Italiano de América que fue recientemente creado en San José de Costa Rica.

Fuera de este pabellón, por contar con espacios propios, quedan Brasil, México, Chile, Argentina, Uruguay y Venezuela, países que poco a poco van presentando también sus ofertas artísticas a los expertos y periodistas que disfrutan estos días del ambiente "glamouroso" que rezuma en la ciudad de los canales.

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