Después de cuatro años y medio de trabajo, el subversivo autor de cómics norteamericano Robert Crumb anunció ayer en su página web la conclusión de su nuevo cómic El libro del Génesis. Un total de 201 páginas donde ha reinterpertrado las escenas del Antiguo Testamento, desde la Creación a la vida de Eva y Adán en el Jardín del Edén y la construcción del arca de Noe.

El propio autor ha confesado al diario británico The Guardian, que con esta obra se ha divertido mucho: 'Es muy visual, muy morboso. Está llena de cosas extrañas que van a sorprender a la gente'. Su editor en el Reino Unido, Jonathan Cape la ha presentado como una 'sátira escandalosa que reexamina el papel de la Biblia en nuestra cultura'. También sostiene que es muy posible que 'airee a la derecha más religiosa'.

El simple hecho de unir los conceptos de Crumb y Biblia ya son motivo para despertar el interés, la polémica e incluso el temor. En la editorial La Cúpula, responsables de su publicación en español, también avisan de que 'aunque Crumb ha sido bastante respetuoso, no se obvia la mirada crítica'.

Esta se centra en llevar a todos los personajes a la arena y desprenderles de su traje místico. 'Es una visión de la Biblia sin tapujos. El texto bíblico es poético, mientras que la versión de Crumb es más salvaje. Si hay dos que echan un polvo, lo echan', confirman desde La Cúpula, donde también recuerdan que la Biblia ya es de por sí un texto 'bastante atrevido'.

Sobre las dificultades que el autor norteamericano ha tenido para la creación de este cómic, en 2005 ya manifestó en una entrevista al New York Public Library sus problemas para dibujar a Dios. Finalmente, un sueño le dio la clave 'y ha acabado pareciéndose bastante a mi padre', ha manifestado Crumb.

Para los editores españoles, con esta nueva obra, el artista británico se mantiene a la altura de Mr Natural o El gato Fritz. 'Cuando uno ya es un virtuoso del dibujo, no se le puede pedir mucho más', afirman.

Tras la finalización de este proyecto, Robert Crumb ha anunciado un viaje de descanso a los EEUU. A la vuelta ya tiene previsto ponerse a trabajar en un nuevo libro junto a su mujer, la artista Aline Kominsky.