Después de un largo proceso, la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha comienza a debatirse en el Congreso. El presidente de la comunidad, José María Barreda, será uno de los compromisarios que defenderá el texto con uñas y dientes en la Cámara Baja. Su principal reto: convencer a los diputados sobre la necesidad de plantear alternativas al trasvase Tajo-Segura.

 ¿Por qué ha decidido ser usted mismo el que defienda la reforma estatutaria?
Soy el presidente de la Junta y es lógico que cuando se va a tomar en consideración la propuesta de reforma de nuestro Estatuto, el presidente esté allí para defenderlo ante las Cortes. Lo hizo Ibarretxe, el presidente de Baleares, el de Castilla y León… Al Grupo Popular parece que le ha incomodado que yo vaya, lo cual es poco comprensible, porque si no hubiera ido también lo hubieran criticado. Lo lógico es que encabece la delegación, que dé la cara y que explique algo de lo que estoy muy orgulloso, ya que se ha conseguido por unanimidad.

¿Cuáles cree que son las razones por las que la dirigente del PP María Dolores de Cospedal ha decidido defender el texto en el Senado?
Ella ha decidido no intervenir en el Congreso, pero lo podía haber hecho perfectamente si hubiese querido. Nada se lo impedía, y no tenía ningún problema reglamentario ni de ninguna índole. Es senadora, por lo que podrá hacerlo en el Senado, pero esa intervención es cualitativamente diferente. Nosotros no intervendremos allí en condición de diputados o de senadores, que no lo somos, sino en condición de diputados del Parlamento regional. Y desde luego no es lo mismo el trámite del Congreso que los procesos posteriores. Pero ella es libre de tomar la decisión que considere oportuna.

¿En qué medida cree que cumple con su trabajo al frente de los conservadores castellano-manchegos al compatibilizar este cargo con el de secretaria general del PP?
No puede estar en todas partes al mismo tiempo, porque todavía no tiene el don de la ubicuidad. Ser la secretaria general del PP a nivel nacional es una gran responsabilidad que le exige mucha presencia en Madrid, así como en todas las comunidades autónomas españolas. Y según sus propias declaraciones, ella dedica solo dos días a la semana a Castilla- La Mancha. Yo pienso que la comunidad requiere y necesita dedicación exclusiva, el mejor tiempo, y no el que sobre de otras preocupaciones prioritarias.
Desde el Grupo Socialista en el Congreso aseguran que la polémica disposición sobre el fin del Tajo-Segura puede ser revisada...
Se hace una consideración de carácter general que es correcta: el Congreso tiene la capacidad para introducir modificaciones en los textos remitidos por los parlamentos autonómicos. Yo desde luego no voy a discutir a la Cámara que representa a la soberanía nacional su capacidad de introducir enmiendas en una ley que es una ley orgánica. Lo que digo es que vamos a luchar hasta el último momento con todas las armas políticas, dialécticas y diplomáticas de las que disponemos para que se respete lo que ha salido de las Cortes por unanimidad.

¿Por qué considera que el trasvase no tiene sentido?
No hay agua para todos y para todo. Por tanto, tenemos que hacer el esfuerzo de un uso racional del agua. Castilla-La Mancha, en tanto que cuenca cedente, tiene prioridad sobre la cuenca receptora, lo dice la ley y el sentido común. Pero, ¿vamos a negarle el agua para beber a otros españoles cuando la necesiten? No, para beber no. Pero, desde luego, sí para que se mantengan en otros territorios desarrollos que no son sostenibles a costa de un recurso que es escaso y sobre el que nosotros tenemos prioridad. Castilla-La Mancha forma parte de la España seca, y en algún caso de la España muy seca. ¡Hay años en los que en algunos lugares de La Mancha hay menos precipitaciones que en el Sáhara! Ahora, de la España seca se saca agua para llevarla también a la España seca, y esa no puede ser la solución.

Compañeros suyos de partido le han acusado de insolidario por su postura sobre el trasvase...
Desde que funciona, necesitando nosotros el agua, hemos trasvasado casi 10.000 hectómetros cúbicos; y, por hacer una comparación gráfica, un hectómetro es el estadio Santiago Bernabéu lleno de agua. Eso es trasvasar riqueza y trasvasar posibilidades, a costa de las nuestras. ¿Alguien en su sano juicio nos puede llamar insolidarios?
¿Sigue considerando necesario un pacto nacional por el agua?
Siempre resulta interesante que en las cuestiones esenciales de un país haya acuerdo, pero es complicado, y no hemos avanzado en la buena dirección, porque hemos ido tomando decisiones parciales y sectoriales territorio a territorio que no facilitan un acuerdo nacional posterior.

¿Qué le parece la propuesta del presidente murciano sobre un nuevo trasvase del Tajo desde Extremadura?
Estamos hablando de un proyecto encargado, no por el Ministerio de Medio Ambiente, sino por el Gobierno de Murcia. Por tanto, es un estudio muy interesado. Lo que quiero subrayar es que en esa búsqueda de nuevas fuentes de agua, lo que está reconociendo el presidente de Murcia es que en la cabecera no hay agua bastante, como veníamos diciendo desde hace años.