La Policía Nacional ha intervenido en Sitges (Barcelona) 316 kilos de heroína de gran pureza -el mayor alijo de esta droga incautado en España y uno de los más importantes en Europa- y ha detenido a cuatro ciudadanos turcos y un rumano.

La droga, que fue intervenida ayer en una operación denominada "Teide", había sido transportada en un velero hasta el puerto deportivo de Sitges, donde fue cargada en una furgoneta con el objetivo de llevarla a una vivienda de la localidad para ser "cortada", según ha explicado la Policía.

Entre los detenidos se encuentran los máximos responsables de los grupos de traficantes proveedor y receptor, Sadullah U. y Yusuf D., los dos turcos y ambos ya implicados en otra operación de envergadura realizada en 1994 por la Brigada Central de Estupefacientes en la que se incautaron 118 kilos de heroína en Madrid.

El resto de los detenidos son otros dos turcos, Ismail S. y Durmus D., y un hombre de origen rumano, Patru M.

La investigación que ha permitido a la Policía abortar esta operación, se inició en febrero cuando se detectó la presencia en España de Sadullah U., alias "Nicol", quien tras su detención en 1994 fue trasladado a Holanda para terminar de cumplir la condena que se le impuso en España por esos hechos.

Los agentes que le seguían la pista, que averiguaron que estaba en contacto con una organización turca que operaba entre Holanda y Turquía, controlaron sus desplazamientos en las últimas semanas por diferentes zonas de Andalucía y de la costa mediterránea hasta que finalmente se detuvo en Tarragona a la espera de la llegada de la heroína.

Mientras, Yusuf D., también conocido por la Policía y uno de los responsables de la red turca proveedora de la droga se desplazó expresamente a España para supervisar toda la operación.

En la tarde del 30 de julio, el barco que transportaba las más de tres toneladas de heroína repartidas en 633 paquetes, un velero "Alper" con pabellón de Estados Unidos y sin matrícula, llegó al puerto de Sitges y sobre las seis de la madrugada de ayer se procedía a cargar la droga en una furgoneta estacionada en el mismo puerto.

Poco después la Policía detuvo a cuatro de los implicados en una cafetería del puerto, justo en el momento en el que se disponían a entregar el vehículo con la droga, mientras que el quinto detenido, el capitán del barco, fue arrestado en un hotel de Tarragona.