Madrid, 7 nov (EFE).- La embajadora de Colombia en España, Noemí Sanín, pidió hoy intensificar la lucha contra grupos xenófobos que cometen agresiones contra inmigrantes como su compatriota Jaime Saa Rodríguez, a quien el pasado domingo cinco jóvenes propinaron una paliza al grito de "¡Viva España!".

"Afortunadamente, en España han tenido muchos éxitos con estas bandas, pero hay que seguir contra ellos", dijo a la prensa a la embajadora, quien también hizo un llamamiento a los inmigrantes, con y sin papeles, para que no dejen de denunciar este tipo de hechos.

Tras conocer la agresión por los medios de comunicación, Sanín acompañó al hospital y a los juzgados a su compatriota, originario de Palmira Valle y residente legal en España, donde vive desde hace 7 años en compañía de su esposa trabajando en la construcción.

Según la denuncia presentada, Saa Rodríguez, de 56 años, fue agredido en la madrugada del domingo en Las Rozas (Madrid) por cinco españoles que le atropellaron con un coche hasta hacerle caer al suelo, donde le golpearon brutalmente.

Fuentes municipales dijeron a Efe que los hechos se produjeron a las 4 de la madrugada en una plaza céntrica de la localidad cuando el agredido regresaba a su domicilio después de cenar en compañía de su esposa, también colombiana, su cuñada y un amigo.

Saa Rodríguez fue atendido en el lugar de los hechos por los servicios médicos y se trasladó a un hospital, donde fue tratado de una fractura en el brazo izquierdo y múltiples golpes.

La esposa relató que los agresores atropellaron a su marido y que a continuación se bajaron del vehículo y se abalanzaron sobre él profiriendo gritos de "Viva España", tras lo cual se fugaron.

"Si él no se mueve le pasan el carro por encima y lo matan. Son unos locos desalmados y criminales", dijo la embajadora, quien afirmó que "nos sentimos agraviados en Jaime todos los colombianos y todos los españoles", a quienes agradeció su solidaridad.

Sanín expresó su "agradecimiento a las autoridades españolas y a la sociedad española" y manifestó que lo ocurrido "no expresa a España y no expresa la actitud con los inmigrantes".