Se miran las unas a las otras. Todas saben quién es quién. Han coincidido en numerosos debates y conferencias. Aunque éste es especial. Son las Primeras Jornadas Internacionales Contra la Explotación Sexual de Mujeres en Catalunya. ¿El objetivo? Encontrar soluciones a una situación cada vez 'más grave': el 90% de las prostitutas son inmigrantes y según un estudio de la Comunidad de Madrid, de cada 1.000 hombres el 45% son clientes o posibles clientes.

Ni Margarita ni Blanca han sido invitadas pero han venido. Defienden el derecho a prostituirse, una postura radicalmente opuesta a la de las ponentes y organizadoras de este debate que empezó ayer y concluirá hoy.

'Nunca hemos llevado a mujeres maltratadas a ningún debate público'. Quien habla es Sara Vicente, representante de la comisión para la investigación de malos tratos a mujeres y de la Plataforma de Organizaciones de Mujeres por la Abolición de la Prostitución. Vicente es tajante. 'Las mujeres que quieren aparecer es porque han normalizado algo tan grave como la prostitución y la violencia'. Los puntos de encuentro entre unas y otras son casi inexistentes.

Para Margarita, activista y prostituta, su trabajo es una opción personal, 'cada uno tiene sus razones' y exige respeto por él. 'Lo ideal sería que estas señoras buscaran trabajo -se refiere a las ponentes-, no se aprovecharan del mío y dejaran de cobrar subvenciones'.

Desde hace unos años, en España se ha reabierto el debate sobre la regularización de la prostitución. En este sentido, Barcelona tiene una ordenanza cívica, que no gusta ni a un sector ni a otro. 'Lo que se hace aquí es estigmatizar la prostituta'. En esto están de acuerdo. La tendencia en Europa es la abolición y eso es lo que piden las feministas, arrojando datos y aseveraciones sobre la mesa. 'Quinientas mil mujeres son esclavas en la UE'.

A Blanca se le va agriando la mirada a medida que escucha los discursos. 'Prostitución y trata es lo mismo', dice una ponente. 'El 85% de las prostitutas es pobre y está en situación de vulnerabilidad', dice otra. Y la doctora en psicología, Victoria Sau: 'Yo tengo un sueño: que las mujeres dejen de ser esclavas sexuales'.

Blanca escucha. Y, de repente, como si no pudiera dar crédito: '!Yo me siento agredida por estas mujeres!'.